Pasaron 20 años de la primera edición en francés del ya clásico Conductas de riesgo. De los juegos de la muerte a los juegos del vivir. Le Breton escribió especialmente para la Segunda Edición en español el siguiente prefacio, donde revisa y actualiza sus planteos generales del libro, cuya nueva edición publicará nuestra editorial.
Esta es la segunda edición de un libro que me es muy querido. Por supuesto, las cosas no han cambiado mucho desde la primera edición en Francia o esta segunda edición en Argentina. El deporte extremo, o sencillamente las actividades físicas y deportivas de riesgo, siguen siendo tan populares como siempre. En este prefacio, voy a retomar algunos puntos que son las claves de lo que se desarrolla en los diferentes capítulos, pero centrándome más bien en el malestar existencial de las nuevas generaciones. El término “conductas de riesgo” procede, por supuesto, del vocabulario de la salud pública. Para el joven, el peligro inherente a su forma de comportarse parece tener poco peso frente a su sensación de estar en desacuerdo con los demás, de sentirse mal consigo mismo y con su vida. Se deja llevar por la necesidad interior de reproducirlas y apenas se cuestiona sus consecuencias.
El riesgo es una materia prima para construirse a uno mismo, con la posibilidad de morir o ser herido