¿Por qué estudiar en la actualidad a un filósofo del Siglo XVII? Hay varias razones, pero la principal es su conceptualización sobre una democracia donde el derecho de los que gobiernan dependen de la potencia de la multitud, y está de las relaciones de poder de las fuerzas que la componen. Desde allí plantea una teoría de la acción y de las pasiones humanas. Esta es la fuerza que sigue teniendo su pensamiento éticopolítico para ofrecer una mirada adecuada que permite afrontar la realidad actual.