Este trabajo fue presentado en el XVI Congreso Argentino de Psiquiatría organizado por APSA, Mar del Plata, Marzo de 2000. El mismo forma parte de una investigación que los autores están realizando, hace más de dos años, sobre la historia de la Salud Mental en la Argentina desde 1957 hasta 1983.
En el imaginario social la práctica del psicoanálisis se sigue asociando con el diván. Esta situación fue producto de una época y una generación de analistas que instituyeron unas condiciones de analizabilidad en la que predominaba una perspectiva idealizada del psicoanálisis. Los tiempos han cambiado. Los pacientes actuales son más difíciles que en el pasado. Nos encontramos con síntomas que no son sólo del orden de la represión de la sexualidad. El analista se encuentra con patologías que no aparecían en los primeros tiempos del análisis.
El presente artículo forma parte del capítulo 11 de La alegría de lo Necesario. Las pasiones y el poder en Spinoza y Freud. Topía editorial, Buenos Aires 2007, 149 páginas. (segunda edición corregida y aumentada)
Pensar es fácil. Actuar es difícil.Actuar siguiendo el pensamiento propio es lo más difícil del mundo.
¿Qué ideas tenían los argentinos, al final de la década del cincuenta, acerca de la Salud mental? ¿Esta era una de sus preocupaciones? ¿Qué prejuicios tenían acerca de la enfermedad mental?, ¿Qué información disponían acerca de los distintos tratamientos psiquiátricos?
El psicoanálisis cura y, en algunas ocasiones, permite prevenir enfermedades. Esta se realiza a través del acto de palabra evitando las actuaciones y racionalizaciones que se establecen en una relación imaginaria donde el análisis se transforma en interminable. En sus primeros escritos Freud enunció que un análisis es interminable, lo que finaliza es un tratamiento.
El cuerpo como lugar del inconsciente, el paciente límite y los nuevos dispositivos psicoanalíticos.
Enrique Carpintero
Resumen del primer capitulo
La curiosa anatomía del deseo inconsciente
"En el comienzo fue la acción"
Sigmund Freud
La superficie que fui describiendo con algunas características en diferentes formaciones psicopatológicas -señalando algunos síntomas- va a aparecer en la fantasía de cada persona de múltiples formas: con la consistencia del hierro, la madera, el algodón. Va a ser transparente como el cristal u opaca, sucia, pegajosa. Puede tomar la forma de un animal, ser femenina o masculina, o ambas a la vez.
En definitiva, superficie definida desde el deseo inconsciente cuyos avatares tienen la marca del desarrollo y resolución del complejo de Edipo y del complejo de castración.
En el editorial del número anterior finalizaba diciendo que civilización y barbarie "son las características que tiene el sujeto. En él conviven fuerzas que lo llevan a reconocerse en el otro humano y otras que tienden a aniquilarlo y, por lo tanto, a destruirse como sujeto". La historia de nuestra cultura nos muestra que cuando una civilización se proclama como la única verdad los otros se transforman en bárbaros. De esta manera los bárbaros son necesarios -como plantea Kavafis en su poema- ya que, en nombre de la civilización, se puede justificar cualquier exterminio.
Una de las características de la cultura es que regla los vínculos entre los seres humanos. De no existir tales vínculos quedarán sometidos a la arbitrariedad del individuo: el de mayor fuerza impondrá sus intereses y deseos. Es así como la cultura favorece la "fuerza de la razón" por encima de la "razón de la fuerza".
El presente artículo está basado en un capítulo del libro que editó Topía editorial, REGISTROS DE LO NEGATIVO. El cuerpo como lugar del inconsciente, el paciente límite y el dispositivo topicoanalítico.
"Todo el mundo parece haber leído a Freud, salvo Moby Dick"
William Faulkner
El presente artículo está basado en un capítulo del libro que próximamente editará Topía editorial Registros de lo negativo. El cuerpo como lugar del inconsciente, la cultura del mal-estar y el dispositivo topicoanalítico.
Este año se cumplen cuarenta años de El Eternauta y veinte años que su autor -Héctor Germán Oesterheld- fue detenido y desaparecido por la dictadura militar. El presente editorial es un homenaje para aquel con quién encontré el destino del placer por la lectura de los grandes relatos.
"Todos nos creemos uno; pero...no es verdad, sino que somos muchos."
Pirandello
1- LOS OBJETOS FETICHES
Nuestra época se caracteriza por la importancia que tiene la representación: no es importante lo que hacemos sino como representamos lo que hacemos. De esta manera la realidad se ha ligado a la representación de tal forma que creemos que esta es la realidad.
Carla Delladonna (compiladora), Rocío Uceda (compiladora), Paulina Bais, María Sol Berti, Susana Di Pato, Marta Fernández Boccardo, Romina Gangemi, Maiara García Dalurzo, Bárbara Mariscotti, Agustín Micheletti, María Laura Peretti, Malena Robledo, Georgina Ruso Sierra