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El lazo social, entre la vida y la muerte

Hace unos días, en la góndola del supermercado, escuché a una mujer diciéndole a otra “se le saltó la cadena, esta vez se pasó de la raya”. Contaba que alguien había descerrajado una tanda de insultos violentos -ñoqui de mierda, zurda, vaga, hija de puta- a la médica de guardia que venía demorada. Faltó poco, agregó, para que le pegara una paliza. La frase de la mujer fue elocuente. En efecto, en medio de un clima social que se va deteriorando cada vez más, los intercambios violentos y las exteriorizaciones de odio son frecuentes. El lazo social se resquebraja y el otro no es un semejante, un conciudadano (palabra perimida hoy). El otro es un enemigo.

El lazo social se resquebraja y el otro no es un semejante, un conciudadano (palabra perimida hoy). El otro es un enemigo.

De chinos y yanquis

Kai-Fu Lee en su libro Superpotencias de la inteligencia artificia. China, Silicon Valley y el nuevo orden mundial, (Editorial Planeta, 2018) pone sobre el tapete las cuestiones que avizora por la competencia entre EE.UU. y China. Señala cómo esta disputa por la hegemonía se puede transformar en un enfrentamiento bélico de proporciones mundiales entre las dos superpotencias. No debemos olvidar que la ciberguerra ya hace mucho que está entre nosotros y ha ampliado el mundo de las sospechas dándonos fake news al ritmo del nanosegundo de los grupos conspiradores de ultraderecha, que han tomado a internet como un arma que dispara a repetición todo el tiempo. En este caso la guerra comercial no es más que otro avance a involucrar a todo el mundo en el conflicto entre EE.UU. y China. Es su protagonista central EE.UU. con la aplicación de aranceles aduaneros que rompen los acuerdos comerciales y no distingue amigos de enemigos, claro que el objetivo central y principal es China. Quien fuera subsecretario de Defensa de EE.UU. Joseps S. Nye en un reportaje (diario Clarín, 11 de febrero de 2025) habla directamente de una amenaza a China por parte de Trump y agrega que los políticos populistas estadounidenses abogan por una desvinculación total de China.

La ciberguerra sigue su curso sin que los usuarios cyborg del mundo sepan mucho cómo sucede.

“¿Quién derrota a quién?”

Parafraseando a Lenin en su discurso del 17/10/1921 es la pregunta del momento que debemos resolver todos los que nos ocupamos de la lucha contra el gobierno de la ultraderecha, de la lucha real activa y práctica.

Los comunistas abordaron el fascismo desde una perspectiva materialista, basando su análisis en las dinámicas económicas y de clase. Después de un periodo de denuncias precipitadas de “fascismo social”, para 1935 la Internacional Comunista definió el fascismo no como un fenómeno psicológico o exclusivamente cultural, sino como una forma represiva de dictadura al servicio de los intereses de una fracción de las élites económicas reaccionarias e imperialistas. Este enfoque vinculó el fascismo directamente a las fuerzas de explotación económica y poder de clase.

Erich Fromm en La psicología del nazismo (1941) señalará: “El nazismo constituye un problema psicológico, pero los factores psicológicos mismos deben ser comprendidos como moldeados por causas socioeconómicas.

Las Sociedades Locas

Resulta difícil, incluso peligroso, extrapolar un análisis de psicopatología individual a toda una sociedad. Sin embargo, ayer como hoy, no cabe duda que surgen sociedades locas, y desencadenan el caos. En el mejor de los casos, desaparecen; otras veces sobreviven bajo una mutua complicidad, tácita o explícita, entre los pueblos y sus dirigentes.

Cuál puede ser la génesis de una sociedad loca?  La respuesta no puede quedar reducida a la personalidad del líder.

La paranoia sobre nuestra salud y su defensa: quedar sin medicamentos, hormonas y cirugías

Cierre en los equipos interdisciplinarios de hospitales públicos, sin fechas para cirugías de adecuación corporal, falta y recorte en los tratamientos hormonales. La realidad de la salud pública y el ataque a la educación sexual integral.

Desde su discurso negador del patriarcado, el proyecto de presupuesto 2025 golpea a las políticas de género, dejando sin partidas a áreas sensibles, hay despidos en lugares fundamentales con un discurso antiobrero y negacionista.

Cada uno para sí mismo, y el capital contra todos (nueve notas para un materialismo visceral)

Interrogarnos sobre la potencia de lo colectivo es indudablemente preguntar también por esa constelación que tiene su vértice en la palabra poder. Pero “poder” no solo se dice en muchos sentidos, sino que señala además los polos de una contradicción. En primer lugar, el poder nos lleva a algo que podríamos definir como “ser capaces de”; entonces, aquello que podemos es idéntico a nuestra potencia. Y lo que un individuo puede, aquello de lo que es capaz, no es algo aislado. Su capacidad de hacer no se circunscribe a los límites de su cuerpo, sino que debemos inscribir ese poder en el incesante intercambio con los demás cuerpos, tanto sus contemporáneos como las generaciones muertas.

Lo que un individuo puede, aquello de lo que es capaz, no es algo aislado. Su capacidad de hacer no se circunscribe a los límites de su cuerpo, sino que debemos inscribir ese poder en el incesante intercambio con los demás cuerpos, tanto sus contemporáneos como las generaciones muertas

Hemos vivido por la alegría, por la alegría hemos ido al combate y por la alegría morimos

La palabra libertad en esta época está asociada al neoliberalismo (y permítanme agregar) medieval. Retomar el legado setentista frente a tanto negacionismo que nos quiere quitar la alegría, me resulta fundamental para este número. Así como titular recordando a Julius Fucik.

Lo más precioso de las elaboraciones marxistas sobre la sexualidad es que conciben que ésta se inscribe en el ámbito de las relaciones sociales y, por lo tanto, también está determinada históricamente, de acuerdo a las relaciones de producción dominantes en una época determinada

El aprendiz de brujo y la apuesta interminable

No hace mucho tiempo atrás existía un dicho popular que llenaba de ilusión a los futuros padres: cada niño nacía con un pan debajo del brazo. Lamentablemente quedó muy lejos de cumplir esa ilusión un adolescente salteño que se suicidó luego de perder el sueldo de su madre haciendo apuestas en un casino online. Trataba de acertar resultados en espectáculos deportivos de todo el mundo, partidos y más partidos de los que en tiempo real conocía los resultados. Abrumado por las deudas entendió que le era imposible resolver la situación y terminó con su vida. El ejemplo vale para mostrar que las apuestas online han generado un problema difícil de enfrentar, uno más, para las crianzas y el desarrollo de las nuevas generaciones.

En la cultura cyborg en que vivimos la prótesis incorporada al cuerpo, -el celular- abre las puertas del casino global. No hay restricción de entrada, todo está facilitado para que nada, ni nadie puede obstaculizar el ingreso de un menor en las ligas de las apuestas

La época de un traumatismo generalizado que abarca al conjunto de la sociedad

Editorial Revista Topía #101 Agosto/2024

Otra vez Milei. Otra vez es necesario alertar sobre las propuestas neofascistas del gobierno. Es que como psicoanalista y ciudadano de esta región del planeta no puedo quedar en silencio ante un gobierno cuyas políticas generan la ruptura del lazo social. Generan el aumento de los efectos de la pulsión de muerte: la violencia destructiva y autodestructiva, la sensación de vacío, la nada. El sujeto se constituye en la relación con el otro en la alteridad, sino no hay sujeto. De allí la necesidad de defender al sujeto como un desafío ético. Esto es lo que venimos haciendo desde nuestra página de la revista.

Como psicoanalista no puedo quedar en silencio ante un gobierno cuyas políticas generan la ruptura del lazo social. Generan el aumento de los efectos de la pulsión de muerte: la violencia destructiva y autodestructiva, la sensación de vacío, la nada

Homenaje a León Rozitchner a los 100 años de su nacimiento

Entrevista de Enrique Carpintero y Alejandro Vainer

Esta entrevista fue realizada para la investigación del libro Las huellas de la memoria. Psicoanálisis y Salud Mental en la Argentina de los´60 y´70 (Editorial Topía, segunda edición, 2018). La versión completa había permanecido inédita y formará parte de un libro de próxima aparición que incluirá las entrevistas allí realizadas. Aquí Rozitchner (1924-2011) rememora algunos de los momentos de su vida, entre los pioneros del psicoanálisis. Su relación con la tumultuosa vida política de esa época en la que fue construyendo una consistente teoría contra el poder desde la filosofía y el psicoanálisis; tanto, que Juan Carlos Volnovich suele definirlo como el mayor filósofo que ha dado nuestro país, si no el único. Por ello en los innumerables cruces entre Marx y Freud, que allá por los años ’60 se proyectaron mucho más allá de la mera teoría, Rozitchner supo ser la referencia obligada. Y su obra lo sigue siendo.

“Cuando volvés a encontrar todo tu pasado, toda la historia, es cuando volvés a encontrarte con la muerte”

¿Quiénes son nuestros aliados confiables contra el fascismo?

Dada la aceleración de los cambios que hemos experimentado recientemente, y considerando la posibilidad de estar ante el final de una época y al comienzo de algo nuevo, desconocido e indefinido, el contexto nos invita a sintetizar algunas de las ideas de quienes han reflexionado sobre la constitución del fascismo. Y sea cual sea el destino de nuestra sociedad, probablemente dinámico, con avances y retrocesos, es crucial interpretar el contexto e intervenir en su devenir histórico. Esto nos lleva a formular algunas preguntas y a desarrollar herramientas clínico-políticas para enfrentar la destructividad humana.

Como plantea Wilhelm Reich, el aparato propagandístico nazi supo conjugar el miedo y la frustración de gran parte de la clase trabajadora, canalizando su descontento hacia una perspectiva que prometía soluciones de defensa de lo nacional, de manera rotunda y autoritaria

Mujeres en la mira del patriarcado neofascista

Ante el incremento de la violencia y la crueldad contra las mujeres y disidencias sexo-genéricas, en el marco del patriarcado neofascista, me interrogo si desde el Psicoanálisis tenemos algo que decir y hacer. Freud se preguntó sobre la violencia de su época, el porqué de la guerra y teorizó sobre ello. Al inaugurar su concepto de pulsión de muerte, consideró inevitable la violencia y la guerra, y parece que el tiempo le ha dado la razón. Pero no dejó de lado considerar posibles formas de amortiguarla y para ello propone apelar a Eros, a las ligazones afectivas, a las identificaciones.

La crueldad es la marca de este patriarcado neofascista, crueldad como shock para amedrentarnos, para debilitarnos, para aislarnos, para eliminarnos

Los casinos virtuales y los niños

Freud en El malestar en la cultura señala que las prótesis tecnológicas, pese a las dificultades de su incorporación, convertían a los hombres en semidioses. Esta observación, entiendo, ha cobrado relevancia en este proceso tecnocapitalista en que vivimos. Desde este punto arrancamos, hace ya muchos años, a pensar cómo los procesos tecnológicos van modificando a los seres humanos, insistiendo en que la hibridación entre humanos y máquinas nos ha constituido en cyborgs.

Nos encontramos ante un nuevo desafío en las crianzas de niños y adolescentes: cómo lograr desenmascarar las trampas que el consumismo capitalista ha disfrazado de juego

Relatos sobre el virus de la soledad

Significantes de esta tragedia griega nos remiten a discusiones y contraposiciones presentes durante la pandemia, en tanto “Antígona, desobediente con el Estado y fiel a los dioses y su linaje, se contrapone al punto tal de entregar su propia vida para honrar la de su hermano Polinices y darle su merecida sepultura, contrariando la orden del rey que le prohibía enterrarlo”.

Los rituales de despedida habituales se vieron trastocados gracias al virus de la soledad que implicó para muchas personas morir sin compañía en sus hogares o en algún hospital

El derrumbe del Yo. Cuando el traumatismo toma dimensión colectiva

Editorial Revista Topía #99 Noviembre/2023

Podemos afirmar que hoy vivimos un mundo desconfigurado, un mundo que lo sentimos atravesado por la tragedia y que ha llevado a la sensación de vulnerabilidad y de vacío. Este mundo es una capa que se ha adherido a nuestro cuerpo sin permiso y que produce efectos cuyos síntomas se expresan en el triunfo de la violencia destructiva y autodestructiva, la sensación de vacío, la nada sobre las pulsiones de vida, el Eros.

La historia de la humanidad es la historia de la  relación del sujeto con la comunidad y no la del Yo individual

Ese reclamo indoblegable

“Hubo un siglo en el cual se desplegaron todas las esperanzas: desde la propuesta de acabar con la miseria hasta la de expulsar los demonios psíquicos que favorecen la destrucción humana, desde la ilusión de generar una infancia libre de temores, hasta la de constituir una vejez sin deterioro, casi inmortal. Hubo también un siglo en el cual se agotaron las esperanzas: desde la confianza a ultranza en la bondad humana como límite de toda destrucción, hasta el ideal que proponía la alianza entre progreso científico y racionalidad al servicio del bienestar. Hubo un siglo cuyo legado aún no hemos recogido totalmente porque su balance no ha concluido.”

Marie Langer intentó responder a un interrogante fundamental: ¿cómo repercute en la construcción de la subjetividad femenina el trabajo invisible que realizan en el seno del hogar?

La psicología positiva, la felicidad y el capitalismo

El año 2000 traía un nuevo tipo de terror en el mundo. Un imprevisto en la programación de las computadoras hizo que las grandes empresas de internet anticiparan un posible colapso mundial, por una cuestión insospechada y aparentemente nimia, internet podía desplomarse. En consecuencia, toda la información acumulada corría el riesgo de desaparecer en los primeros segundos del nuevo siglo. Al posible tsunami se lo caracterizó como Y2K. La causa era que los programadores no agregaron la centuria en el fechado. Para las máquinas el año 2000 no existía. Por ello el nuevo siglo venía con una bomba dentro de los sistemas de internet, nadie sabía cómo leerían los programas el pasaje del año 1999 al 2000. Un nuevo tipo de fin del mundo acechaba. Por eso, se recomendaba no prender las computadoras el 1 de enero de 2000. Finalmente, poco efecto tuvo el que parecía ser el tsunami que arrasaría toda la información mundial acumulada en la red. Con medidas urgentes y atinadas de las empresas tecnológicas, la nueva biblioteca de Alejandría sobrevivió indemne, fue un fuego fatuo.

La psicología positiva se lanza a barrer con los conocimientos psicológicos previos, entabla una cruzada contra el malestar y las enfermedades mentales pregonando que el bienestar y la felicidad son los antídotos que esta sociedad global necesita

Gramática del poder: la vida mentirosa de las palabras

Nuestro mundo jamás se ha caracterizado por la igualdad, en cuanto a su administración de bienes y servicios, ni en cuanto a Derechos y garantías, ni aun en su distribución o reparto del tiempo y el espacio. “Lo común” es una declaración siempre inexacta, siempre sujeta a los efectos y condiciones desigualantes, históricos e innumerables. Pero es también una construcción y una búsqueda irrenunciable. La libertad, no es entonces un bien del que disponer, ni un derecho o acceso al consumo, ni una expresión más de la propiedad privada, ni tampoco la capacidad de imponer deseos, sino la brecha que se construye singular y colectivamente cada vez que achicamos, disminuimos, desarmamos y combatimos el predominio de la desi-gualación, y construimos un “común”. 

El desamparo en la cultura podría ser la versión actual de aquel texto freudiano acerca de la cultura y su malestar, una versión que permite dimensionar mejor tantos estados de derrumbe subjetivo con los que trabajamos día a día y con los que convivimos

Las venas rotas de Sal. Una elegía para Francisca

Cuenta Francisca que al Santuario del Salar volvieron los capangas,
Dizque son los de aquí con los de allá. Hay nuevos gringos y otros que ni conocemos por su forma de hablar. Vinieron con máquinas pesadas para explotar el litio de nuestro Salar. Y nada para acá, más tienen, más quieren y quieren más. Nos rompen las venitas de nuestra sagrada mamá, revientan las aguas de vida y a los críos, ya sin mamar, volvieron los capangas, volvieron otra vez, con máquinas, quebrantan el suelo sagrado y otras chiquitas en el cielo con ojos de mal.

¿Y nuestra muerte a quién le importa?

El suicidio puede ser definido de distintas maneras, perspectivas e ideologías. Es poner fin a la vida, apagar la angustia, pero, sobre todo, debe entenderse como una problemática de la salud mental del contexto donde se desarrolle la persona y principalmente de los recursos simbólicos con los que cuenta.
Este año, en el mes de febrero, se viralizó una noticia del Estado Español, dos adolescentes se tiraron por una ventana y en el acto murió uno de ellos. Dos menores, acoso escolar, transexualidad, inmigración e información que llega a cuentagotas o transgiversadas fueron el foco de atención que luego se desvaneció en el aire o, mejor dicho, en la red de redes.

La victimización y la falta de aceptación están relacionadas con el comportamiento suicida entre jóvenes y adultos transgénero, y con pensamientos e intentos suicidas entre jóvenes transgénero

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