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Topía en la Clínica

Un dispositivo de abordaje de las adicciones

Presentaré un dispositivo de tratamiento de las adicciones para adultos que se va adecuando de acuerdo a la peculiaridad de cada sujeto, dado que no existe una forma “única” de abordaje.

Contratransferencia y subjetividad del analista. Cien años después

La cuestión de la contratransferencia sigue desatando polémicas. Mi intención es avanzar en una perspectiva específica para este instrumento de trabajo. Para ello haré una breve vuelta sobre la historia para luego avanzar en algunas propuestas.

 

I

Cómo trabaja con… crisis psicóticas

Topía en la Clínica afianza los cambios anunciados en nuestro número anterior. A partir de este número inauguramos esta sección que busca ver cómo trabajan distintos psicoanalistas con diversas problemáticas de nuestra clínica. Para comenzar lo hacemos con las crisis psicóticas. Estas situaciones tienen formas específicas de abordaje. Héctor Fenoglio y Claudia Huergo nos muestran la manera en que trabajan y conceptualizan la praxis psicoanalítica en dichas situaciones. Seguimos brindando herramientas para seguir esos “nuevos caminos de la terapia psicoanalítica” que nos abrió Sigmund Freud.

Psicoanálisis de las crisis psicóticas  

Atrapados en la des-esperanza Jaque a nuestro quehacer clínico

Con este trabajo me propongo reflexionar a partir de tres situaciones clínicas que me jaquearon como psicoterapeuta.

El espacio de la consulta, es, de algún modo, un observatorio de las mutaciones de la sociedad, de los cambios en las formas de subjetivación. Tenemos el privilegio de escuchar jóvenes que están en un margen de la sociedad. Lo que les ocurra, tendrá mucha relevancia en sus vidas, y en la sociedad como conjunto.

“Actualidad” de la neurosis de angustia

La pretensión de este trabajo es dar cuenta brevemente de la actualidad que mantienen hoy día las conceptualizaciones freudianas en torno a la neurosis de angustia. En este sentido, dicha “actualidad” remite tanto al carácter actual de su etiología -identificada y descripta por Freud en textos tempranos y diferenciada, junto a la neurastenia, de la de las psiconeurosis de defensa-, como a la vigencia que tal propuesta tiene en nuestros tiempos para dar cuenta de ciertos modos actuales de padecimiento.

Subjetividad, diagnósticos y nuevos dispositivos psicoanalíticos

Hace ya unos cuantos años, en mi trabajo dentro del manicomio, intuía que un paciente es mucho más que su diagnóstico. Eran “una esquizofrenia”, “una paranoia”, “una epilepsia”. Me parecían simples etiquetas para certificar una historia sin fin. Con dicha marca se justificaba lo injustificable: largas internaciones que poco tenían de terapéuticas. Estos argumentos, sean psiquiátricos o psicoanalíticos, eran coartadas para encubrir la defensa de un sistema manicomial.

Del encuadre de Procusto a los dispositivos psicoanalíticos

El encuadre o setting genera controversias en los psicoanalistas. No figura en ningún diccionario de psicoanálisis, pero hay mucho escrito sobre el tema. Suele definirse como el marco en el cual se produce el análisis. Sus constantes, muchas veces asimiladas a las “reglas de juego”, incluyen el espacio de trabajo, el uso del diván, los horarios, frecuencia y duración de sesiones, interrupciones, la cuestión del pago y el rol del analista. Algunas de estas reglas se formulan explícitamente mientras que otras nunca se comunican y forman parte de los ritos propios de cada análisis.

 

CUESTIONARIO: Encuadre y dispositivo psicoanalítico

 La cuestión del encuadre y del dispositivo psicoanalítico es un punto importante en el trabajo clínico. Convocamos a tres psicoanalistas con tres preguntas para abordar desde distintas perspectivas estas temáticas.

Formación y praxis psicoanalítica

Hay ríos de tinta sobre la formación del analista. En la mayoría de los casos se describe una esencia por fuera de las sociedades y la historia. Se excluye la materialidad que se produce para que uno pueda devenir psicoanalista en un momento histórico social determinado. Y no todos los analistas somos iguales. La formación de cada uno como analista no puede ser tomada por fuera de la propia vida, las propias experiencias, la clase social, la ideología, la sociedad y el tiempo en que vivimos.

Entre el sometimiento y la soledad.

Algunas consideraciones sobre el desasimiento de la autoridad parental.

Juan (15 años) llega a consulta por interés propio, pero su madre me solicita tener previamente una entrevista conmigo. En esa entrevista remarca su preocupación por la dislexia de su hijo, la cual, según ella dice, le ocasiona dificultades respecto a su rendimiento en el colegio. (Sin embargo aporta datos que ubican a Juan como un estudiante que transita sin mayores problemas sus estudios secundarios: se ha llevado algunas materias por año, recuperándolas luego en el turno de exámenes de diciembre).

La formación del psicoanalista

Cuestionario: 1- ¿Podría relatar cómo, cuándo y dónde se formó como analista? 2- A partir de su desarrollo profesional, ¿qué considera importante en la formación de un analista? ¿Podría ejemplificarlo con viñetas clínicas? 3- ¿Qué le aconsejaría a un profesional recién recibido que quiere empezar su formación analítica?

Alfredo Caeiro

 

1-Se podría contestar a esta pregunta con un relato cronológico y detallado de cómo, cuándo y dónde, tipo curriculum, pero como analista no puedo hacerlo, porque la formación, por lo menos en mi caso, tuvo que ver con posiciones políticas y militantes, identificaciones, transferencias y frustraciones. Esta pregunta me compromete muy íntimamente y desde esa intimidad prefiero contestarla.

La interpretación en la clínica psicoanalítica

Para abordar uno de los puntos centrales de las intervenciones clínicas del analista convocamos a tres psicoanalistas para responder a tres interrogantes sobre la temática.

1-¿Cómo usa la interpretación con pacientes neuróticos?
2-¿Cuál es la diferencia, si la hubiera, en su intervención con pacientes límites o psicóticos?
3-Ejemplique lo anterior con algunas viñetas clínicas.

La interpretación supone evidenciar y hacer llegar al paciente aspectos de sus propios contenidos inconscientes y de las consecuencias que ellos tienen. Contenidos del inconsciente reprimido (si resultan de mecanismos defensivos más avanzados, llevando entonces el sello del conflicto) o del llamado inconsciente escindido si se originan en traumas ontogénicamente arcaicos, signados por la ausencia, el trauma masivo, el terror y los mecanismos primitivos.

¿Juegos sexuales, conductas abusivas o prácticas sexuales entre niños?

Si hay algo que está cambiando en nuestro tiempo, es la sexualidad de los adultos y los niños. La represión que operaba sobre la genitalidad de los adultos, hoy se ha aflojado y podríamos preguntarnos qué efectos esto ha producido en la sexualidad infantil.

Las intervenciones del analista

Los psicoanalistas intervenimos mucho más de lo que pensamos. Nos suelen enseñar que trabajamos sólo con la palabra. El paciente asocia con palabras y el psicoanalista escucha casi todo el tiempo, hace algunas preguntas y comentarios, y lo más importante, interpreta. Si el análisis fuera solamente eso, un análisis podría llevarse adelante por mail o chateando.

El psicoanalista en equipo. Un obstáculo contratransferencial

A los psicoanalistas no nos enseñan a trabajar en equipo. Todo lo contrario. A lo largo de nuestra capacitación se nos promueve para trabajar con un solo paciente en eso que llamamos “individual”. Los institutos de formación y nuestros libros de cabecera apuntan hacia la misma dirección. Los análisis de los analistas (también individuales), las supervisiones y los seminarios configuran un modelo de analista “individual”. Sea de la orientación que fuera: freudiano, kleiniano, lacaniano. Cualquiera sea el “iano”, siempre será “individual”.

El psicoanalista trabaja en equipo

El psicoanalista no siempre trabaja clínicamente solo con un paciente. Muchas veces lo hace en conjunto con un psiquiatra, e incluso forma parte de un equipo con otros profesionales. En dichos contextos cambia la situación clínica, y queremos interrogar qué sucede con sus variables, como el trabajo con la transferencia, el inconciente y las resistencias. Para ello convocamos a dos psicoanalistas para trabajar un tema que siempre queda de lado.

Cuerpos apropiados: El llamado Sindrome de Munchausen por procuración

Las aventuras del Barón de Münchausen, escrita en 1785 por Rudolf Raspe, teniendo como protagonista al militar alemán que sirvió como oficial de caballería en las campañas rusas contra los turcos otomanos, de quien se refería que contaba historias exageradas sobre sus aventuras y hazañas.
Procuración: poder que alguien da a otra persona para que en su nombre haga o ejecute algo.

Etica del final de la vida

La ÉTICA que deriva del Griego Ethos: raíz o fuente de todos los actos particulares o costumbres es una ciencia práctica, normativa de los principios de la moralidad de los actos humanos, ciencia filosófica no teórica, sí práctica o empírica y valorativa y en alguna medida relacionada con la teología. La ética es el estudio de la moralidad. Una reflexión y análisis cuidadoso y sistemático de las decisiones y comportamientos morales.

Neutralidad y Abstinencia. Una introducción.

La neutralidad y la abstinencia son dos cuestiones a repensar para los analistas del siglo XXI. Este par tiene casi un siglo de existencia y la concepción que de ellos se tenga marca la propia práctica clínica. Por eso, para comenzar, es necesaria una revisión histórica crítica de estos conceptos. “El giro del psicoanálisis”, tal como fue designado por Enrique Carpintero, implica un estudio de distintos aspectos teórico-clínicos para estar a la altura de las exigencias de nuestra época, que nos marca considerar “nuevos dispositivos psicoanalíticos”. Y siempre el primer paso de toda investigación es la historia.

Adolescentes afectados por la catástrofe de Cromagnon: un dispositivo de intervención psicológica

Nos proponemos transmitir la experiencia realizada en la Unidad de Salud Mental, área Adolescencia, del Hospital de Niños Ricardo Gutiérrez, con los adolescentes afectados que consultaron después de la catástrofe de Cromagnon del 30 de diciembre del 2004, y aportar una reflexión crítica a partir de lo que podemos pensar tres años después.

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