Dossier | Page 14 | Topía

Top Menu

Dossier

El eros o el deseo de la voluntad

Editorial

Para introducirnos en el tema de este dossier es necesario destacar la condición pulsional del ser humano. Es decir, el interjuego entre las pulsiones de vida (Eros) que tienden a la creatividad y las pulsiones de muerte que llevan la destrucción. Sin embargo, cada una de estas pulsiones son indispensables ya que, como plantea Freud, los fenómenos de la vida son una acción conjugada y contraria entre ambas.

Memoria, historia e identidad

En sentido riguroso el Psicoanálisis no tiene una teoría específica de la memoria, a pesar de que el concepto esta presente en todos los desarrollos de Freud, quien explícitamente señala que “Toda teoría psicológica digna de alguna consideración habrá de ofrecer una explicación de la “memoria”1. Tampoco estrictamente existe una consideración metapsicológica de la memoria, a pesar de que quizás sea justamente la memoria la que más se acerca para el psicoanálisis a una consideración del Ser.

Entre memorias y olvidos

La memoria entendida como un hecho político no remite a la inmediatez sino que aborda todos aquellos acontecimientos no inminentes y aprovechables. Vale decir: la memoria se configura por las marcas que están y que operan como testimoniantes de que un hecho existió. Así, de una manera u otra, las personas vivimos con esas fisuras, con esas marcas, pero intentamos permanentemente volcarnos al olvido. Por ello, es de significativa importancia la construcción de una memoria colectiva como mecanismo disparador que nos indica de dónde venimos para anticipar hacia donde vamos.

La falta de memoria

Ideas sueltas

Hace algunos pocos años atrás mantuvimos una conversación sobre este tema, en aquel momento el sujeto olvidado era la praxis grupal y se trataba de recoger los hilos de una historia deshilachada.

Primo Levi: el recuerdo de los ultrajes

La memoria humana es un instrumento maravilloso, pero falaz. Es una verdad sabida, y no sólo por los psicólogos sino por cualquiera que haya dedicado alguna atención al comportamiento de los que lo rodean, o a su propio comportamiento. Los recuerdos que en nosotros yacen no están grabados sobre piedra; no sólo tienden a borrarse con los años sino que, con frecuencia, se modifican o incluso aumentan literalmente, incorporando gacetas extrañas.

Las libertades individuales y el poder del Estado

Al nacer, se verá si tiene pene y, entonces, se lo inscribirá en el Registro Civil del Estado con nombre de varón. Tendrá, identidad “masculina”.
Al nacer, se verá si tiene vagina y, entonces, se la inscribirá en el Registro Civil del Estado como mujer. Tendrá, identidad “femenina”.

Las huellas de la memoria

Introduccion al libro: Psicoanálisis y Salud Mental en la Argentina de los ’60 y ‘70 Tomo I (1957-1969) / Tomo II (1970-1983)

La editorial Topía presentará en el mes de setiembre el primer tomo del libro Las huellas de la memoria. Psicoanálisis y Salud Mental en la Argentina de los ’60 y ’70. Primera parte (1957-1969), 410 páginas.

Límites y excesos del concepto de subjetividad en psicoanálisis

Que el ser humano cambia históricamente, que la representación de sí mismo y de su realidad no se mantiene estrictamente en los términos con los que fuera pensado por el psicoanálisis de los comienzos, no hay duda. Insisto, no tan en broma, que si a las histéricas del siglo XIX se les quedaba la pierna dura por el deseo inconfesable de caminar hacia el cuñado, nuestras histéricas de hoy padecen colapsos narcisistas cuando sus cuñados no les otorgan crédito sexual.

Diálogo del poeta y la Parca

(Hay un pensar, tras Spinoza, y hay una voz: la de Gardel)

In memoriam de Enrique Marí, filósofo entrañable.

 

EL POETA: La veo siempre vestida de negro... ¿Es para alertarnos que no hay en su mundo más que la tristeza de una mirada negra? ...Casi no se distingue su rostro, parece tomado entero por las sombras...
LA PARCA: Antes vestía únicamente de blanco... Yo era la luz, y mi cara y mis hombros y hasta mis pechos estaban desnudos..., pura alegría..., desconocía los secretos del mal, vivía en la naturaleza de mi origen sin que mi alma se doliera con mi carne...
EL POETA: ¿Qué había detrás de tanto blanco?... ¿Qué era esa luz nunca opacada por la pena...?

El existencialismo es un humanismo

“Es también lo que se llama la subjetividad, que se nos echa en cara bajo ese nombre. Pero ¿qué queremos decir con esto sino que el hombre tiene una dignidad mayor que la piedra o la mesa? Pues queremos decir que el hombre empieza por existir, es decir, que empieza por ser algo que se lanza hacia un porvenir, y que es consciente de proyectarse hacia el porvenir.

Freud y el problema del poder

“En Freud se trataría de explicar la estructura subjetiva como una organización racional del cuerpo pulsional por imperio de la forma social. Si cada uno de nosotros ha sido constituido por el sistema de producción histórico, es evidente que el aparato psíquico no hace sino reproducir y organizar ese ámbito individual, la propia corporeidad, como adecuado al sistema para poder vivir y ser dentro de él. Muchas de las explicaciones que desarrolla Freud se basan en modelos de las instituciones represivas sociales interiorizadas: la policía, los militares, la religión, la economía, la familia.

Caósmosis

“Considerar la subjetividad desde el ángulo de su producción no implica ningún retorno a los tradicionales sistemas de determinación binaria, infraestructura material-superestructura ideológica. Los diferentes registros semióticos que concurren a engendrar subjetividad no mantienen relaciones jerárquicas obligadas, establecidas de una vez para siempre. Puede ocurrir, por ejemplo, que la semiotización económica se haga dependiente de factores psicológicos colectivos, según permite constatarlo la sensibilidad de los índices bursátiles a las fluctuaciones de la opinión.

La subjetividad del idiota plantea la pregunta ¿Cómo inventamos lo que nos mantenía unidos?

Editorial

En la novela Cosmópolisis de Don DeLillo un joven y arrogante millonario norteamericano viaja a través de New York recorriendo desde una punta de la ciudad a la otra para cortarse el pelo.

Las enseñanzas de Moore y los terrores de Escudé.

La inseguridad como sistema de seguridad.

Cuando la invasión a Irak aún prometía ser un paseo patriótico con flores y banderitas ante el paso de los tanques y alguno que otro “daño colateral” sin importancia, en el programa Periodistas, un apasionado defensor del “American way” proclamaba los riesgos de las terribles armas de Hussein y el derecho norteamericano a defender la seguridad y la libertad de todos. El personaje, inconfundible, era el comentarista de política nacional e internacional Carlos Escudé, contingentemente argentino, aunque, titularía Oliver Stone, norteamericano por naturaleza.

Niños que se quedan solos en su casa: un fenómeno urbano de hoy

Desde la dictadura militar del 76 se profundizó en la Argentina un modelo económico que provocó la acentuación de las diferencias sociales, con aumento de la miseria y gran pauperización de la clase media.

La triple interdicción de "las mellizas"

En mayo del 2002 vinieron a consulta al Patrocinio Jurídico de la Facultad de Derecho (UBA) -Comisión Especial de Derechos Humanos- coordinada por el Centro de Investigaciones Sociales y Asesorías Legales Populares (CISALP), dos mujeres jóvenes, G. y B.. A raíz de dicha consulta, decimos abordar el tema.

La época del nanosegundo

Editorial

Las señales que podemos encontrar en la calle del padecimiento subjetivo son numerosas. Lo que denominamos el exceso de realidad produce monstruos en una subjetividad, construida en la fragmentación y vulnerabilidad de las relaciones sociales. Este se manifiesta en diferentes indicadores sociales: violencia urbana, violencia familiar, aumento de la cantidad de suicidios, soledad, indiferencia hacia el prójimo, etc.

La crueldad: un recorrido

" 'Finster in de oign', frase en idish, que significa: oscuridad en los ojos. Esta frase la escuché desde que tengo memoria. Es parte de ese inalienable idioma de la infancia. Muchas veces, mezcla del español y el idish. Un idish nunca aprendido, en muchas ocasiones usado por los adultos para que los niños no sepamos algo que no debíamos todavía conocer, y así, entonces, rápidamente entendido por nosotros.

Arte de la crueldad

En su libro Vida y muerte de la imagen (Historia de la mirada en Occidente), Régis Debray divide la historia del arte en tres edades de la mirada: “nuestra mirada fue mágica antes de ser artística. Y en la actualidad se está haciendo económica”.

La crueldad atravesando la historia y el psiquismo

Que los humanos siempre hemos sido crueles para con nosotros, para con los otros y para con otras especies, es una verdad de Perogrullo. Basta recorrer cualquier tratado de historia universal para encontrar múltiples episodios de crueldad sórdida y lúgubre. Sin embargo, más difícil es encontrar referencias a la crueldad en libros o diccionarios técnicos de psicoanálisis, psicología y humanidades o ciencias sociales en general.

Páginas

Suscribirse a Dossier